El Partido Popular vuelve a evidenciar su crisis interna durante el congreso andaluz del partido en Granada tras un cruce de declaraciones y “puyitas” entre la lideresa madrileña, Díaz Ayuso, y el Presidente del partido, Pablo Casado, con Moreno Bonilla, presidente andaluz, en mitad de la refriega.
La batalla comenzó el viernes con la intervención de la dirigente madrileña y su verso suelto, Ayuso instó a Moreno a «Volar libre y tomar sus propias decisiones”, añadiendo que “solo se desgasta quien se comporta como una marioneta«. Declaraciones que provocaron el delirio y la ovación popular del público afiliado asistente al congreso.
Casado acudió al quite en la última sesión del congreso andaluz. «Tienes las manos libres para hacer lo que consideres que es mejor para Andalucía, que será lo mejor para España», señaló, en clara alusión a las palabras de la presidenta madrileña.
El dirigente popular ha llegado a admitir en su intervención que le da «igual cuándo» sean las elecciones andaluzas porque tiene la «plena convicción» de que Moreno va a «arrasar» y va a obtener una «mayoría aplastante o mayoría absoluta» y que todos los andaluces le pedirán que siga consolidando el cambio que se inició hacer tres años en esta comunidad.
Casado se ha pronunciado así durante su intervención en el acto de clausura del 16 Congreso Autonómico del PP andaluz que se ha celebrado en Granada, tras el discurso de Juanma Moreno, quien también le ha trasladado su apoyo para que «más pronto que tarde» sea el nuevo presidente de España.
Ha querido dejar claro que «nunca» ha hablado con Moreno de fecha de las elecciones andaluzas, pero que sí le trasladó, en los momentos de la moción de censura en Murcia y la posible «desestabilización» de los gobiernos del PP en Castilla y León y en Comunidad de Madrid, que tenía todo su apoyo para hacer lo que considerara oportuno, pero que pensara primero en Andalucía y después en el partido, un mensaje que le vuelve a trasladar hoy.
«Todo el PP de España siempre ha confiado en Juanma Moreno», según ha expresado Casado, quien ha señalado que los andaluces creyeron en él en las elecciones autonómicas de 2018 porque miraba a los ojos y decía la verdad. «Aunque algunos pocos no creían en él, la mayoría del partido y de los andaluces siempre creyeron en Moreno», ha señalado el dirigente popular, quien ha expresado que está orgulloso de que Moreno, esa fuerza de «gestión eficaz y reformista», la esté proyectando hacia todos los compañeros que siempre han creído en él.
Tres años después del cambio en Andalucía, según Pablo Casado, Moreno es un referente de un gobierno «eficaz, con honradez, con las ideas claras, de cercanía, de moderación y de firmeza en los principios». Ha señalado que Moreno está creando empleo en Andalucía y ha atraído inversión bajando impuestos y eliminando burocracia, mientras que en esta comunidad ya no se «ocultan» las listas de espera en la sanidad ni los «barracones» en centros educativos, sino que se respeta y se trabaja por mejorar las condiciones de los profesionales sanitarios y a los docentes.
Asimismo, Pablo Casado ha puesto el acento en que, con la llegada de Moreno al Gobierno andaluz, se han abierto «las ventanas y se han levantado las alfombras» del Palacio de San Telmo, porque esta tierra no merecía ser noticia por los «casos de corrupción». Ahora es noticia, según ha agregado, por la transparencia, la rendición de cuentas y la honestidad, que es lo que caracteriza al PP.
Ha querido lanzar el mensaje de que, sea quien sea el que haga algo irregular en administraciones gobernadas por el PP, no tendrá cabida en este partido, porque la corrupción es la «peor lacra de la función pública». Asimismo, Casado ha considerado «injusto» que los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2022 «maltraten» a Andalucía.