Aunque sigue insistiendo en que su objetivo es “agotar la legislatura”, el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha situado las próximas elecciones autonómicas entre los meses de junio y octubre de 2022.
“Octubre también puede ser un buen mes, pero junio es un mes en el que la gente ve las cosas de otra manera”, ha dejado entrever el máximo mandatario del Gobierno regional en una entrevista en Canal Sur Televisión. En junio, «la gente tiene ya el sol, ve los días más largos, hay psicología social de felicidad, que yo le llamo».
Además, Moreno Bonilla ha puesto el acento en que la situación de la pandemia del coronavirus también puede influir en la fecha electoral, puesto que quizá hay que adelantar los comicios para coger «fortaleza» para afrontar lo que venga por delante.
Que se haya tumbado el proyecto de los presupuestos andaluces para 2022, con las enmiendas a la totalidad presentadas por PSOE, Unidas Podemos y Vox, ha sido definitorio para realizar este análisis por parte del presidente de la Junta de Andalucía.
A raíz de lo anterior, ha desvelado que quiere “construir una nueva mayoría en Andalucía desde la zona templada. Mucha gente está cansada de la confrontación extrema y quiere que nos pongamos de acuerdo”. A su juicio, “hay otro estilo de hacer política, personas que quieren un gobierno estable y serio”.
“Estoy en condiciones de lograr esa mayoría. No estoy en disposición de gobernar con Vox ni con el Partido Socialista”, ha puntualizado Moreno Bonilla, quien ha agregado que aspira a alcanzar una mayoría suficiente que le permita gobernar en solitario con «pactos puntuales» con otras fuerzas políticas.
Con todo, ha asegurado que “es un gran error que no estén a la altura de unas circunstancias históricas. Quieren erosionar a este gobierno. Después de décadas de Gobiernos socialistas, Vox y PSOE tienen en Andalucía coincidencias en términos tácticos y electorales. Quieren tumbar al Gobierno andaluz pensando en sus siglas”.
Para Moreno, aquí no hay «nada ganado y hay que trabajar hasta el último día», y ha apuntado que es consciente de que el PSOE-A siempre ha sido una maquinaria electoral «muy bien engrasada», aunque su nuevo secretario general, Juan Espadas, aún tenga una situación de «debilidad» en su formación.
«Tácticas electorales»
En cuanto al panorama en los partidos de la oposición, principalmente PSOE-A y Vox, Juanma Moreno ha manifestado que, con su rechazo a los Presupuestos andaluces para 2022 han dejado claro que sólo piensan en las «siglas, en las tácticas electorales y en los intereses propios» y no de los andaluces.
Ha indicado que le sorprende, sobre todo, la actitud de Vox, que han sido socios externos del Gobierno andaluz, porque ha entrado en una etapa de «descalificación personal» hacia él. En su opinión, a ese partido le pierde una «enorme ansiedad electoral» y quiere que haya elecciones ya porque quieren «sopasar al PP».
«No son capaces de pararse un minuto a pensar en Andalucía, sólo piensan en Vox, en Vox y en Vox», según ha dicho Moreno de los portavoces de esa formación en Andalucía, que además no dejan de ser una «delegación» de la dirección nacional, que es la que realmente toma las decisiones.
Ha defendido que los acuerdos suscritos por su Gobierno con la ultraderecha se han cumplido en su mayor parte, aunque esta formación diga lo contrario. Ha insistido en que Vox está en una estrategia de querer «terminar de manera abrupta la legislatura», cuando no tiene sentido acabarla ahora.
Respecto al Partido Socialista andaluz, Moreno Bonilla ha puesto el foco en la «debilidad» y la falta de «solvencia» que aún tiene el secretario general, Juan Espadas, al que le tiemblan «las piernas» a la hora de tomar decisiones.
Ha considerado que ha perdido una «oportunidad» de presentarse como un político «útil» con su rechazo a los Presupuestos andaluces de 2022 y ha considerado una «tomadura de pelo» y un «cachondeo» que le pida a la Junta que presente ahora unas nuevas cuentas para 2022.