La Policía de Aragón ha retirado, en una operación realizada por el Grupo TEDAX, ácido pícrico y sodio metálico de varios institutos de Educación Secundaria de la comunidad, sustancias peligrosas que llevaban décadas almacenadas en las instalaciones. Estos compuestos representan un riesgo potencial, tanto por su inestabilidad como por sus usos industriales y militares.
El ácido pícrico, en particular, es una sustancia altamente volátil, conocida por su capacidad para aumentar la potencia de explosivos menos sensibles. Se emplea en la fabricación de municiones y explosivos, así como en productos como cerillas, baterías eléctricas y en la industria del cuero. También se utiliza en el grabado de cobre, en la producción de vidrio coloreado y en la síntesis de tintes.
El sodio metálico es una sustancia muy reactiva que se oxida en presencia del oxígeno y reacciona violentamente con el agua. Se suele utilizar en los laboratorios para la desecación de disolventes.
La peligrosidad del almacenaje de estas sustancias en los centros educativos se incrementa cuando cristaliza por deshidratación o por el paso del tiempo, volviéndose altamente explosivo. En ese caso es capaz de explosionar en caso de choque, roce o sacudida violenta, incluso en el momento de proceder a la apertura del tapón, sea metálico o plástico, de la botella contenedora.
Desde la Policía Nacional han hecho un llamamiento a aquellos centros educativos que pudieran tener almacenadas estas sustancias químicas en sus laboratorios, poniéndose de inmediato en contacto con el 091 para que el grupo de TEDAX proceda a retirarlas de forma segura.