El alcalde de Cádiz, José María González ‘Kichi’ ha declarado hoy que «hemos tenido que meterle fuego para que en Madrid se fijen en nosotros, y eso es una lástima». Una reivindicación que ha realizado hoy con un megáfono a los manifestantes del sector del metal, en huelga indefinida, ante la puerta de la Subdelegación del Gobierno.
El alcalde ha arengado la lucha de los trabajadores del metal afirmando ante ellos que «llevar décadas y décadas de enganchar un contrato precario con otro, eso es violencia sistemática«. «Y desde Cádiz no lo vamos a consentir«, ha aseverado antes de manifestar a los trabajadores que «su» Ayuntamiento «estuvo, está y estará con vosotros».
«En Cádiz somos obreros y no delincuentes. Lo que hacemos es defender el plato de comida encima de la mesa y nada más y que no venga nadie a insinuar siquiera que en Cádiz se montan barricadas y que son cuatro exaltados los que están quemado coche», ha afirmado González.
Previamente, en su cuenta oficial de Twitter recogida por Europa Press, el alcalde proclamaba sobre los huelguistas que «ni son criminales, ni son delincuentes, ni son cuatro jóvenes exaltados, como decían ayer en el programa de Ana Rosa o en algún medio afín a los privilegiados. Son padres y madres de familia que luchan por poner un plato de comida sobre la mesa».
«No es sólo un convenio, se trata del presente y el futuro de la Bahía. Frente a los discursos de despachos, frente a quienes se ponen de perfil, frente a quienes se quedan en las formas para no entrar en el fondo, muestro no sólo todo mi apoyo, sino también mi lucha desde el papel y la trinchera que me toca ahora disputar y combatir», ha manifestado el alcalde de Cádiz, que ha añadido que «violencia es que en Madrid sólo nos escuchen cuando arde nuestra tierra harta de aguantar fatigas».
«Tenéis todo mi apoyo. Porque sois los míos. Porque soy de los vuestros. Por un convenio laboral digno, contra el cierre de Airbus, por la carga de un trabajo y por nuestros hijos y nuestras hijas. Qué viva la lucha de la clase obrera«, termina su hilo abierto en su red social en apoyo de los trabajadores del metal.
Tercer día de huelga
La huelga indefinida en el sector del metal de la provincia de Cádiz cumple este jueves su tercera jornada con nuevas barricadas y concentraciones en las puertas de industrias tractoras como los centros de Navantia, Airbus o Alestis después de que la reunión convocada por la Consejería de Empleo, Formación y Trabajo Autónomo de la Junta de Andalucía con la Federación de Empresas del Metal de la provincia de Cádiz (Femca) y representantes sindicales haya concluido sin acuerdo tras más de 12 horas de negociación.
El foco del conflicto se centra en la renovación del convenio colectivo, cumplido desde diciembre del pasado año. Para la patronal, las subidas del 2, 2,5 y 3% que piden los representantes de los trabajadores, además de la rebaja de cuatro horas de trabajo cada año, conllevarían «la desaparición de la industria gaditana, que tendría que competir con la de otras provincias que parten de una situación más ventajosa».
La patronal, “intransigente”
Por su parte, los sindicatos han acusado a la patronal de las empresas del metal de mantener una postura «intransigente» durante la negociación y de haber «pasado los límites de la buena fe». Asimismo, han señalado que seguirán con la huelga, que «las calles seguirán viva» y han advertido de que «lo que pase en las calles será responsabilidad de la patronal».
En rueda de prensa, el secretario de UGT FICA en el Campo de Gibraltar, José Manuel Rodríguez Saucedo, ha manifestado que «los sindicatos no se han levantado de la mesa de negociación» que se está celebrando en Sevilla y han pedido a la Federación de Empresas del Metal de la provincia de Cádiz (Femca) «que vuelva a ella para acabar con la negociación».