La portavoz socialista de Educación, Mari Carmen Soler, ha denunciado el uso “sectario” que, a su juicio, está haciendo el Gobierno de Aragón, presidido por Jorge Azcón, del convenio firmado con las Diputaciones de Huesca y Teruel para realizar obras de mantenimiento y conservación de los colegios públicos. Según Soler, el propósito inicial de este acuerdo era llevar a cabo pequeñas reparaciones y acondicionamientos en los colegios, de manera que se beneficie a la mayor cantidad posible de municipios, aliviando la carga financiera de los ayuntamientos. Sin embargo, la diputada socialista ha asegurado que el Ejecutivo aragonés está utilizando este convenio para eludir sus propias responsabilidades y competencias.
Soler ha destacado que, en lugar de asumir las obras que corresponden al Gobierno de Aragón, el Ejecutivo está incorporando estas actuaciones al convenio, lo que podría dejar a muchos municipios sin recibir la atención necesaria debido a la limitación del presupuesto. Un ejemplo que la portavoz socialista ha citado es la ampliación del centro educativo de Bronchales, para la cual se invertirán más de 123.000 euros. Según Soler, estas obras deberían estar contempladas dentro del plan de contratación del Departamento de Educación y no a través de este convenio.
“No estamos en contra de la inversión en el centro de Bronchales, o en cualquier otro, porque estamos convencidos de que son obras necesarias”, ha explicado Soler. No obstante, ha manifestado su desacuerdo con que el Gobierno de Azcón esté utilizando este convenio a su favor, sin considerar adecuadamente a otros centros educativos que podrían verse perjudicados por la falta de presupuesto.
La diputada también ha criticado que, a pesar de que este año el número de centros beneficiados por el convenio ha aumentado de 23 a 35, el último convenio de la pasada legislatura cubrió 98 localidades. A su juicio, la lista de colegios seleccionados no refleja realmente las peticiones y necesidades que han trasladado los ayuntamientos, sino que responde a criterios establecidos exclusivamente por la Consejería de Educación y la Diputación de Teruel, sin tener en cuenta las demandas locales.
Por todo esto, Soler ha exigido al Gobierno de Aragón que asuma sus responsabilidades, realice las obras necesarias con su propio presupuesto y deje de “aprovecharse” de este convenio para su propio beneficio. En sus palabras, esta actitud demuestra una vez más el “desprecio” del Ejecutivo hacia el mundo rural y los pequeños municipios.