El Gobierno de Aragón ha publicado este viernes una nueva convocatoria de subvenciones para la reestructuración y reconversión de viñedos, con un importe total de 2,7 millones de euros. Estas ayudas, destinadas a viñedos que produzcan uva para vinificación, tienen como objetivo principal mejorar la competitividad de las explotaciones vitivinícolas, adaptarlas al cambio climático y hacerlas más sostenibles desde el punto de vista medioambiental.
El plazo para solicitar estas ayudas estará abierto durante un mes, y las subvenciones estarán disponibles para viñedos que tengan una superficie mínima de 0,25 hectáreas. El límite máximo de ayudas por viticultor será de cinco hectáreas, aunque esta cantidad podría incrementarse si la disponibilidad presupuestaria lo permite.
Entre las operaciones que se podrán subvencionar se encuentran las reconversiones varietales, especialmente aquellas que busquen mejorar la calidad de la uva o la sostenibilidad medioambiental. También se apoyarán la reubicación de viñedos y las mejoras técnicas en la gestión de los mismos, incluyendo la instalación de sistemas avanzados de producción sostenible y la reducción del uso de fitosanitarios.
En cuanto a las condiciones específicas de las operaciones, aquellas relacionadas con la replantación de viñedos o el cambio de variedades deberán ser anuales o bienales, dependiendo de si se lleva a cabo una reubicación del viñedo. Para la reconversión varietal, se requerirá un proceso de sobreinjertado o injertado sobre pie franco. Asimismo, se subvencionarán las mejoras en los sistemas de conducción sostenible, especialmente en parcelas plantadas hace más de cinco años.
Estas ayudas se enmarcan dentro de una inversión más amplia de 9,8 millones de euros que el Gobierno de Aragón destinará a lo largo de 2025 para apoyar al sector del vino, como anunció el presidente aragonés, Jorge Azcón, durante su visita a la comarca de Campo de Borja en febrero. Este presupuesto supone un aumento significativo con respecto a años anteriores, ya que es un 31% superior al de 2023.
Entre los principales objetivos de esta inversión se incluyen la promoción del vino aragonés y su calidad diferenciada tanto en mercados nacionales como internacionales, el apoyo a los Consejos Reguladores de las Denominaciones de Origen, la modernización del sector y la creación del registro vitícola que exige la normativa europea. También se prevé colaborar en proyectos destacados como ‘Cariñena Ciudad Europea del Vino 2025’ y ‘Zaragoza, Capital Mundial de la Garnacha’.
Las ayudas convocadas este viernes buscan fortalecer el sector vitivinícola aragonés, adaptándolo a los nuevos desafíos climáticos y de sostenibilidad, y apoyando su crecimiento y expansión tanto a nivel nacional como internacional.