El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha prometido este sábado desarrollar en su segundo mandato con mayoría absoluta una Presidencia «siempre abierta y accesible siempre al lado de los andaluces» y ha reivindicado el «nuevo andalucismo orgulloso» que aspira a que Andalucía sea «la comunidad más importante de España y referencia en prosperidad» actuando con «espíritu solidario y rechazando privilegios» para construir una «España fuerte, próspera y fraternal».
Moreno ha lanzado este mensaje tras jurar el cargo en un multitudinario acto de toma de posesión en Sevilla que ha congregrado a unas 600 personas y que se desarrolla por primera vez a pie de calle, concretamente, en el Paseo de Roma, ante la fachada principal del Palacio de San Telmo, sede de la Presidencia de la Junta.
«Comienza un nuevo tiempo para Andalucía, un tiempo de ambiciones renovadas, que afronto con responsabilidad e ilusión y siempre al servicio de los andaluces. Os invito a perseguir juntos nuevos horizontes de progreso y bienestar para nuestra tierra y a soñar tan alto como podamos imaginar», ha cerrado su intervención tras renovar al cargo.
Moreno ha iniciado su discurso convocando a todos los andaluces para diseñar un futuro en el que tiene una «fe absoluta» para abrir «una etapa de nuevas ambiciones, nuevas ideas y nuevos proyectos» en la que no quiere «mirar atrás» y en la que irá «a por todas» convencido de que Andalucía «puede ofrecer grandes cosas a España
y al mundo».
«En un momento histórico inquietante y perturbador con una crisis energética, una inflación disparada, una guerra en Europa y una polarización creciente y divisiones estériles, los andaluces no somos inmunes a la preocupación«, ha admitido el presidente de la Junta, que ha advertido de que «no existen varitas mágicas, ni tampoco soluciones inmediatas frente a los problemas que nos acechan y a las dificultades que se avecinan, pero sí un Gobierno sólido, con determinación y con confianza en Andalucía, para salir adelante cada día y lo que queremos hacer abonados al optimismo y a la alegría».
En este sentido, Moreno ha reivindicado un «nuevo andalucismo orgulloso» que apuesta por hacer las cosas «a nuestra manera, con nuestra forma de vivir y de sentir» y ha apostado por «exportar nuestro sello andaluz de convivencia, coraje y entusiasmo por la vida». Tras citar a un referente del andalucismo como Carlos Canos, se ha mostrado convencido de que «el mundo sería mejor si fuese un poquito menos áspero y un poquito más andaluz».
«En los últimos años Andalucía ha perdido el miedo, se ha liberado de complejos y ha doblegado estereotipos. Se ha hecho plenamente consciente de lo mucho que vale y de lo rica que es. Hoy se asoma a las calles de nuestra tierra y a los ojos de nuestra gente un nuevo orgullo andaluz. Un andalucismo renovado y alejado de tópicos» en cuya recuperación ha señalado el protagonismo de los jóvenes, que «muestran con frescura, ingenio y libertad que hay una nueva Andalucía que investiga, crea, innova, cuida, enseña e influye y lo hace en andaluz, con el poderío y la riqueza de nuestro acento».
Moreno ha insistido en que «el liderazgo de Andalucía y el orgullo de ser andaluces no son para mí palabras huecas ni quimeras idealistas, sino metas concretas hacia las que avanzar y con las que podemos llevar al éxito si creemos en nosotros mismos». A su juicio, este liderazgo pasa por estar «a la cabeza en creación de empleo y generación de riqueza; tener una sanidad moderna y de calidad y una educación de excelencia; igualdad real entre mujeres y hombres; también una economía verde y sostenible, y que cada familia, sea como sea y en cualquier rincón de Andalucía, tenga a su alcance las oportunidades para desarrollar su vida con prosperidad, tranquilidad y libertad».
Su prioridad, la defensa de Andalucía
En clave más política, Moreno ha defendido que «España necesita a Andalucía porque somos una tierra decisiva, con capacidad de aportar y con deseo de cooperar con el resto de territorios» y se ha mostrado convencido de que «juntos, con espíritu solidario y rechazando privilegios, es como debemos construir la España fuerte, próspera y fraternal que queremos».
«Andalucía siempre ha mantenido lealtad y compromiso con las instituciones democráticas, con la Corona, con la Constitución Española y con su Estatuto de Autonomía. Desde esta lealtad, como presidente de Andalucía, participaré con determinación en cualquier debate que interese a España y a Andalucía con una voz alta y clara en defensa de lo que necesitan y quieren los ocho millones y medio de españoles que vivimos en esta tierra y para poder defenderlo, hay que conocerlo y sentirlo como propio», ha subrayado antes de dejar claro que su «primera obligación como presidente es escuchar a los andaluces, sintonizar con sus preocupaciones y saber interpretar sus deseos».
Moreno ha cerrado su discurso con emocionadas alusiones a su familia, agradeciendo a su esposa, Manuela Villena, que sea su «crítica más dura», y las «preguntas» de sus tres hijos, también presentes en el acto, y recuerdos también a su padre, «a quien siempre tengo en la memoria cuando las cosas son importantes», a su madre y hermanas «que me apoyan y me cuidan» y a sus suegros y cuñados que me han dado una «segunda casa».
El acto ha contado con la presencia del expresidente del Gobierno Mariano Rajoy; el jefe de la oposición y presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo; seis presidentes autonómicos del PP, Isabel Díaz Ayuso (Madrid), Alfonso Rueda (Galicia), Alfonso Fernández Mañueco (Castilla y León), Fernando López Miras (Murcia), Juan Jesús Vivas (Ceuta) y Eduardo Castro (Melilla); además de la expresidenta de la Junta, Susana Díaz, y el alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz.
También han asistido el secretario general del PSOE-A, Juan Espadas, la portavoz parlamentaria de Vox, Macarena Olona, aunque sin duda la presencia más llamativa ha sido la de la exvicepresidenta del Gobierno Soraya Sáenz de Santamaría.